Avilés

 

14/04 mañana tranquila, dedicada a la lavandería y a la lectura por la tarde tour por Avilés.

Plaza de Carbayo
Avilés es la tercera ciudad más importante de Asturias. Situada a ambos márgenes de una ría, destaca por tener uno de los cascos históricos medievales mejor conservados del norte del país que contrasta con la construcción de edificios y complejos modernos como el Centro Niemeyer, que la sitúan en la cabeza de las ciudades europeas que miran al futuro sin olvidar el pasado. Muchos no la visitan creyendo que va a ser una ciudad industrial maltratada por los años cuando curiosamente es la ciudad más antigua de Asturias. Empezamos nuestra andadura por el Barrio de Sabugo, el que fuera el barrio de pescadores desde la Edad Media hasta el siglo XX.

iglesia vieja de Sabugo
La plaza del Carbayo y la vieja iglesia de Sabugo son los simbólicos emblemas y el corazón de un histórico barrio que todavía conserva el sabor, el arraigo y el valor que lo vio nacer.

Sabugo fue un barrio extramuros en la época medieval, y tardó mucho tiempo en integrarse en la ciudad, pero curiosamente hoy es la zona del Casco Histórico que más disfrutan los avilesinos en su vida cotidiana. Y también los que vamos de fuera. Porque todo en Sabugo denota su vocación cosmopolita, desde su iglesia medieval, hasta la Mesa de Mareantes ubicada al lado del ábside, donde se reunía el gremio de pescadores para tomar las decisiones estratégicas sobre sus incursiones cantábricas, y donde Pedro Menéndez hizo el reclutamiento de marineros para sus expediciones transoceánicas. Esta villa es una verdadera ciudad de las artes. El arte lo impregna todo. Está en la calle. Pero no solo en su arquitectura. En cada rincón, en cada esquina, o en cada plaza descubres una escuela de diseño, una escuela de artes y oficios, el conservatorio de música, el mítico teatro Palacio Valdés, o un Museo tan interesante y diferente como el de la Historia Urbana de Avilés… Una de las identidades de esa ciudad son los soportales de sus calles entre ellas la calle Galiana, muy conocida por el famoso descenso que tiene lugar en el día grande del antroxu (carnaval) de Avilés. Aunque durante todo el año es una de las calles más ambientadas de la villa, a todas horas: a la hora del vermú, a la hora del vino...

Calle Galiana
En lo alto de la calle Galiana está una de las puertas al parque de Ferrara, que si ó si, hay que ver, nosotros nos dimos un paseo muy agradable, es como un parque ingles con amplias praderas, grandes arboles y con aire a un lugar ilustre, también tiene una zona afrancesada con pérgola y complicados senderos.

La fiesta de El Bollo Fue declarada Fiesta de Interés Turístico en el año 1972, tienen su origen a finales del siglo XIX, siendo una manifestación de convivencia y participación popular que celebra la llegada de la primavera y el fin del ayuno pascual. Tienen lugar al finalizar la Semana Santa, en el Domingo de Ramos y Lunes de Pascua.

Parque Ferrera
La denominación de la fiesta proviene de su componente gastronómico, un bizcocho mantecado y escarchado en forma de trébol de cuatro hojas denominado Bollo. El lunes de pascua se realiza una multitudinaria comida al aire libre, ocupando las calles del casco histórico y parques, en una hilera continua de mesa con mas de cuatro mil metros de extensión, una media de 12.000 personas se sientan a compartir tertulia y comidas.

La Calle Rivero es junto a la Calle Galiana, las más bonitas que ver en Avilés y perfectas para ambientase durante un rato a la época medieval gracias a su arquitectura y el empedrado del suelo.
Esta calle peatonal del siglo XV, antiguo Camino Real a Oviedo, va desde la Plaza del Ayuntamiento hasta la Avenida Cervantes, y enamora por la gran cantidad de soportales, por la fuente de los caños y la Capilla de San Pedro.

Iglesia nueva de Sabugo
Seguimos el recorrido y llegamos a la imponente iglesia de Santo Tomás de Canterbury o Iglesia nueva de Sabugo, inaugurada en el 1903, es otro de los lugares que visitar en Avilés. Esta iglesia de estilo neogótico se construyó gracias a la riqueza de los indianos y la burguesía local para hacer frente al gran crecimiento de la ciudad y así poder albergar a todos los feligreses que no cabían en la iglesia Vieja de Sabugo.
En la fachada del templo destacan las dos torres de aguja de 47 metros y la portada.

Plaza de España, conocida como El Parche y situada en el corazón del casco antiguo, está presidida por el Ayuntamiento y el Palacio de Ferrero, uno de los edificios de estilo barroco más antiguos de la provincia, además de ser un importante cruce de algunas de las calles con más encanto de la ciudad como la de Ferrería, Rivero o La Cámara.

San Nicolas de Bari
Plaza de Domingo Álvarez Acebal, saliendo de Plaza de España y pasando por delante de la fuente de los caños de San Francisco te encuentras con esta plaza , está rodeada de casas de estilo medieval porticadas, destacan dos joyas arquitectónicas como son el Palacio de Balsera y la Iglesia de San Nicolás de Bari, un antiguo convento de la comunidad franciscana, construido en el siglo XIII.

Plaza del Mercado
La Plaza del Mercado o la Plaza de los Hermanos Orbón es quizás uno de los espacios arquitectónicos más curioso, el hecho de que la plaza esté completamente rodeada de galerías es lo que le da esa originalidad. Al igual que el parque del Muelle, la nueva plaza del mercado fue edificada desecando terrenos de marisma y canalizando subterráneamente el río Tuluergo, que discurría por la actual calle de La Muralla. Este original espacio arquitectónico fue construido en la segunda mitad del siglo XIX. Tiene unos soportales de considerable altura. Bajo los mismos hay locales comerciales y de ocio. El centro de la plaza está ocupado por un edificio que alberga los puestos de venta. Los lunes se celebra el tradicional mercado semanal, uno de los más concurridos de la región, que fue instituido hace más de quinientos años por concesión de los Reyes Católicos, complementado con notables privilegios comerciales para la ciudad, que había sido asolada por un gran incendio. Su cercanía al parque del Muelle (cuando éste era el principal lugar del ocio ciudadano), convertía, con mal tiempo, los soportales de esta plaza en cobijo de los avilesinos, transformándose en «el paseo de invierno.

Edificios de diferente color
El parque del Muelle edificado sobre antiguos terrenos de marisma, es uno de los símbolos del crecimiento avilesino entre los siglos XIX y XX. El parque fue uno de los espacios ganados entonces a la mar, lo que también hizo que se desplazara el puerto, de origen medieval (situado al lado del templo de los Franciscanos), hacia la margen izquierda de la ría.

Su extensión es de 14000 metros cuadrados, combina una bella labor de jardinería, que incluye soportales vegetales, con abundantes esculturas. Hasta los años setenta era el lugar de solaz preferido de los avilesinos para iniciar y mantener relaciones sociales.
Lo que termina de singularizar al elegante parque del Muelle son las doce estatuas aquí levantadas: diez están inspiradas en motivos de la mitología griega.
Finalmente, y en el extremo opuesto a la fuente de entrada, se levanta el conjunto escultórico dedicado en 1917 a Pedro Menéndez de Avilés, «El Adelantado de La Florida», donde fundó San Agustín de La Florida, el núcleo urbano más antiguo de EE.UU.
El rey Felipe II le nombró Capitán General de la Mar Océana y le encargó toda clase de misiones en América y Europa.

Realmente Avilés nos ha sorprendido gratamente.

Fotos :https://photos.app.goo.gl/dw64b3eT5Hi43tRL7



Comentarios

  1. Muy bonita a mi también me gusto, me encanta como la explicas,que buen tiempo tienes 😊 a mi me llovió

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  2. Siempre pasaba inadvertida pero realmente tiene su encanto, gracias

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  3. La mejor foto de Avilés se obtiene desde la ermita de La Luz.

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  4. Pues no sabia q Avilés fuera tan bonita. En estos blogs siempre se aprende algo 🤗

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